Descripción
Indicaciones
DORMONID es un inductor del sueño de corta acción, indicado de la siguiente manera:
En adultos: Sedación consciente antes de y durante intervenciones diagnósticas o terapéuticas, con o sin anestesia local. Anestesia. Premedicación antes de inducir la anestesia. Inducción de la anestesia. Componente sedante en la anestesia balanceada. Sedación en las unidades de cuidados intensivos (UCI).
En niños: Sedación consciente antes de y durante intervenciones diagnósticas o terapéuticas, con o sin anestesia local. Anestesia. Premedicación antes de inducir la anestesia. Sedación en las unidades de cuidados intensivos (UCI).
Posología
Midazolam es un sedante potente que exige una administración lenta y el ajuste posológico en cada paciente. Se debe individualizar la dosis y se recomienda encarecidamente ajustarla para obtener de manera segura el grado de sedación deseado según las necesidades clínicas, el estado físico y la edad del paciente, y la medicación administrada concomitantemente. En los adultos mayores de 60 años, los pacientes en estado crítico, los pacientes de alto riesgo y los pacientes pediátricos, la dosis debe determinarse con cautela, y han de tenerse en cuenta los factores de riesgo relacionados que presente cada paciente. El efecto del fármaco se manifiesta unos 2 minutos después de la inyección i.v., y el efecto máximo se alcanza al cabo de 5-10 minutos aproximadamente.
Precaución de Uso
El midazolam debe utilizarse solamente cuando se disponga de equipos de reanimación adecuados para la edad y el tamaño, dado que su administración i.v. puede reducir la contractilidad del miocardio y provocar apnea. En raras ocasiones se han producido eventos adversos cardiorrespiratorios graves, como depresión respiratoria, apnea, paro respiratorio o paro cardíaco. Estos episodios potencialmente mortales son más probables cuando se administra el preparado en inyección demasiado rápida o en una dosis alta. No se recomienda usar benzodiacepinas para el tratamiento primario de las enfermedades psicóticas. En caso de sedación consciente practicada por una persona que no sea anestesista, se recomienda encarecidamente revisar las guías de práctica más recientes.